Ergonomía en el diseño de packaging

Ergonomía en el diseño de packaging. Cuando la marca ofrece un producto se presenta este primer reto ¿Cómo debo presentar mi producto?

Si bien a primera instancia una etiqueta bien diseñada puede ayudar en un primer paso para el emprendimiento, no es la respuesta más acertada a largo plazo.

Si se quiere diferenciar el producto por encima de la competencia un empaque bien diseñado añadirá valor o calidad a su producto.

 

La RAE define la ergonomía como el estudio de la adaptación de las máquinas, muebles y utensilios a la persona que los emplea habitualmente, para lograr una mayor comodidad y eficacia.

 

Bajo esta definición la ergonomía se acota entre la usabilidad y funcionalidad del producto/para el producto; y como consecuente la estética del mismo.

Dichas valores (usabilidad/funcionalidad/estética) darán una personalidad al producto. De esta delgada línea se encarga el diseño.

 

Los empaques y la ergonomía en el diseño de packaging

Los empaques deben estar pensados para transmitir un mensaje al consumidor. No deben limitarse solo a cumplir con su funcionalidad. Ya que el producto dará una experiencia con la marca al consumidor.

Es decir, esta experiencia se conforma de sensaciones que trasmite el producto al usuario a través del packing. Se trata de “transmitir sensaciones”.

Como bien lo cimento Louis Cheskin innovador del marketing y psicólogo del siglo XX:

 

El producto se impregna del packaging, donde un producto de mayor precio y/o atractivo visual, puede ser percibido como de mejor calidad o superior únicamente por la sensación.

 

 

El diseño de empaque tiene como eje la ergonomía, y esta a su vez tiene como herramientas de estudio los siguientes criterios:

 

  • La antropometría: Donde se analiza la interacción dimensional entre consumidor y producto. Aquí se tiene en cuenta si será utilizado por un adulto, un niño, un joven, una mujer o un hombre.
  • Las medidas biomecánica: Investiga la relación entre movimiento y postura del usuario. Con el fin de calcular el peso, área y superficie del producto, y conocer la forma más segura para utilizar el mismo.
  • La asociación cognitiva: Se encarga de la forma en que los empaques o envase se comunican con las personas. Un ejemplo es la manera en que se le indica al usuario cómo abrirlos, cómo cerrarlos, cómo conservarlos, etc.

     

     

 

Los empaques a lo largo de la historia gracias a la industria y los avances tecnológicos han ido modificando sus procesos de fabricación así como los materiales/sustratos según se han ido cambiando las necesidades del consumidor y las especificaciones del producto.

Algunos se han vuelto tan icónicos que formar parte de la cultura pop, ya que su forma y etiquetado los han hecho diferenciarse tanto que han quedado en la memoria de miles de personas.

 

Tal es el caso de Coca-Cola como un ejemplo básico, donde la silueta del envase se forma parte de los gráficos publicitarios convirtiéndose en un icono.

 

O bien los empaques de marcas como MAC donde la sofisticación del empaque por su acabado, textura, color y manera particular de abrir hace que los empaques sean conservados solo porque “se ven bien”. O en algunos casos de productos de bebidas alcohólicas coleccionables.

Un caso a menor escala en México, es “la caja” de Huevo San Juan, que se viralizo en redes sociales. Ya que es utilizada por mucha gente de menores ingresos para trasportar sus pertenecías al viajar.

 

 

Aquí entra la funcionalidad del empaque, que si bien su diseño gráfico del packing de huevo San Juan no esta tan atractivo, el sustrato es funcional por su resistencia haciéndolo emblemático para los mexicanos.

 

 

Gracias a este fenómeno huevo San Juan pudo implementar una estrategia de marketing donde finalmente compenso la fidelidad de los consumidores con maletas para viajar con el logo de la marca.

 

En la actualidad existen también otras preocupaciones por los materiales y procesos de fabricación de los empaques.

 

Tenemos el reto de diseñar empaques amigables con el medio ambiente. Ya que una marca comprometida con el media ambiente no debe ser solo una idea para la estrategia de la marca; si no debe tener ética y compromiso social/ambiental como parte de sus valores.